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¡Por fin! Este fin de semana las primeras estaciones inician la temporada de esquí 2019-2020 en la península (ver noticia completa). Pero antes, es posible que te surja la duda, sobre todo si es tu primer año tras comprar material: ¿Qué debo hacer para prepararme? ¿Tengo que hacer un preparamiento especial al material de esquí? Resolvemos tus dudas para que nada estropee tus viajes a la nieve.
En primer lugar debemos tener en cuenta que el material de esquí sufre en cada descenso que hacemos, mientras nosotros lo damos todo y disfrutamos a tope. De hecho, la abrasión de la nieve puede acabar reduciendo la capacidad de deslizamiento tanto de los esquís como de la tabla, reduciendo su vida útil. Como añadido, también significa que se reduce tu seguridad. Dicho esto, esperamos haberte convencido de la necesidad de hacerle al material un cierto mantenimiento, algo que también hay que hacer al inicio de la temporada, cuando lo desempolvamos tras unos meses de inactividad.
Qué hacer con los esquís y con la tabla de snowboard cuando las sacamos del armario
Reconozcámoslo: es la parte más amada de nuestro material de esquí. Pues bien, debes saber que las tablas suelen tener la suela llena de rayas de haber estado haciendo el cabra por ahí. Por eso, hay que ponerles cofix, un polietileno que cubre esos surcos o heridas cuando se derrite.
El problema llega cuando te topas con una raya más profunda de lo normal que deja al descubierto la fibra del esquí o de la tabla: en ese caso habría que tapar la hendidura enseguida, antes de que se humedezca y se haga más grande. En cualquier caso, y ante la sospecha de que el material pueda estar tan dañado que pueda llegar a hacer peligrosa la práctica del esquí o del snow, toca llevarlo a un taller profesional para que vean si tiene arreglo.
Otro aspecto importante a mirar son los cantos, imprescindibles para agarrarse bien a la nieve. Los limaremos con una lima común (o con limas con adaptadores) hasta conseguir un tacto que rasque, pero que no corte. Es muy importante hacer bien esto, y si no te ves capaz, repetimos: mejor ir a un profesional para no estropear el material.
¿Y durante la temporada de esquí?
De nada te servirá hacer un mantenimiento impoluto al material de esquí cuando los sacas del armario para empezar la temporada si después, durante los meses que vas yendo a las pistas, solo les haces caso para divertirte.
Lo primero que debes hacer es secar muy bien el material después de cada fin de jornada en la nieve. Especialmente importante quitar la humedad de la parte metálica que hay a los lados para evitar la oxidación. A continuación, debes limpiarlos en profundidad, aunque pienses que ya no tiene nieve. Los esquís también tienen mucha suciedad. Además, para evitar daños en el transporte de los esquís y de las tablas, es aconsejable usar tiras autoadherentes (para que las suelas no choquen entre ellas).
Igualmente, debes guardar el material en las fundas que venían del fabricante. Aunque llevar los esquís y la tabla en la baca del coche sea lo más cómodo del mundo, no es lo más aconsejable para mantenerlos en buenas condiciones; en cualquier caso, totalmente prohibido hacerlo sin protección: el aire, la humedad y la sal que salpica cuando conducimos puede perjudicar el material.
Por último, es recomendable que una vez al año enceres y afiles los esquís y la tabla para favorecer su deslizamiento. Puedes hacerlo ahora, por ejemplo, que vas a preparar tu material para el inicio de la temporada de esquí 2019-2020. ¿Estás listo/a?