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¿Estás buscando una estación de esquí para bajar por laderas nevadas y surfear cerca de Madrid? La Pinilla es una auténtica joya que encontraremos a pocos kilómetros, en el bonito macizo de la Sierra de Ayllón en el Sistema Central, a 1.500 metros de altitud. Está en una zona que pertenece al municipio de Cerezo de Arriba (Segovia). Desde las pistas podemos contemplar preciosas vistas de la meseta norte, especialmente desde su cota más alta, que es El Mirador, a 2.200 metros de altitud.
Esta estación de esquí que abrió sus puertas en 1968 es bastante conocida por su cercanía a ciudades como Madrid, Segovia, Burgos o Valladolid. Pese a su fama, y dado su tamaño más reducido que otras enormes de los Pirineos, no suele tener grandes aglomeraciones y se hace bastante agradable esquiar en La Pinilla a esquiadores debutantes y a familias. ¿Quieres conocer todo lo que ofrece esta estación de esquí? No te pierdas este análisis a fondo.
La estación de esquí de La Pinilla es pequeña en comparación con otras que suman decenas y decenas de pistas. Aún así, tiene bastantes posibilidades: suma 15,6 kilómetros esquiables, en los que podremos descender por 4 pistas verdes, 7 azules y 13 rojas; no hay ninguna negra para esquiadores expertos. Y por si la climatología falla, cuenta con 196 cañones que garantizan la fabricación de nieve artificial en la mayor parte del área esquiable. Estos son los sectores de La Pinilla:
Es la base de la estación de esquí, donde se encuentran todos los servicios: las taquillas, hay bares, tiendas en las que podremos alquilar el material que necesitemos, las escuelas de esquí y también hotel y albergue. Aquí está la pista verde La Cabaña, que cuenta con cañones de innivación.
Es la zona intermedia de La Pinilla, donde también hay escuelas de esquí y una cafetería para hacer una pausa durante la jornada. Es un sector muy apropiado para los que se están iniciando en el esquí, ya que hay dos cintas transportadores y un telesquí que permiten que cojamos confianza en tres pistas verdes.
Una área muy familiar, ideal para ir con los peques. Hay pistas fáciles y también es donde está el snowpark para los amantes del freestyle.
Si eres un esquiador avanzado, este y el siguiente que veremos son tus sectores. Aquí es donde encontraremos las pistas más complicadas y también las más largas.
Si quieres retos de mayor envergadura, no te pierdas esta área a las faldas del Pico del Lobo, con pistas más exigentes como Mirador, Cervunal o Stadium, donde nos toparemos con interesantes desniveles y muros. Es también donde suele haber mayor acumulación de nieve debido a su altura. El lugar más espectacular de la estación de esquí por sus vistas. A destacar el descenso de la pista el Retorno, el más largo que podemos encontrar en la zona centro de España.
La Pinilla es una estación de esquí pequeñita, pero es más que suficiente para pasar una jornada de esquí de lo más divertida y con retos para todo tipo de esquiadores. Si de algo puede presumir es de cuidar bien sus pistas y de generar un ambiente muy familiar, con un trato exquisito por parte de todo el personal de la estación. Además, tiene todos los servicios que la ponen a la altura de las mejores:
Hay dos restaurantes para comer en la estación de esquí de La Pinilla con buena relación calidad-precio, seguramente mejor que en otras de los Pirineos: uno en la base, el Mont Blanc, que ofrece menú diario; y otro en Gran Plató, a 1.800 metros, con menú tipo autoservicio, bocadillos y pizzas y con barra. Además, hay tres bares con terraza para comer algo rápido tipo bocadillos o raciones, y tomar alguna cervecita o refresco.
Hay tres lugares donde podremos alquilar todo lo que necesitemos para esquiar o surfear en las pistas de La Pinilla, podemos comparar precios y calidades y escoger el que más nos apañe.
Como veis, La Pinilla es pequeña pero tiene un buen surtido de servicios, y no faltan lugares para aprender a dar nuestros primeros pasos en la nieve, con clases de esquí y snowboard.
Hay establecimientos para comprar algo de alimentación y ropa y material deportivo, como Surf3, que además tiene escuela exclusiva de snowboard.
En La Pinilla nos podemos quedar a dormir en un hostal muy nuevo de dos estrellas con 21 habitaciones o en un albergue más económico y con buenas condiciones con habitaciones de 2, 4, 10 y 14 camas. Todos con fantásticas vistas de las montañas nevadas del Sistema Central.
En verano se abre un espacio para bicis de montaña BMX de descenso que fue pionero en España en 2004 y donde se celebran pruebas de alto nivel y de gran prestigio.
El acceso a la estación de esquí de La Pinilla es muy fácil. El mejor medio de transporte es el coche por la flexibilidad que nos da, aunque también podemos llegar en transporte público:
Hay enlaces entre Riaza (pueblo desde donde podemos coger la línea que nos lleva a las pistas) y Segovia, con Linecar, y entre Riaza y Madrid y Burgo de Osma, con Aisa-Grupo. Consulta los horarios en su página web.
La autovía A-1 nos deja a las puertas de la estación de esquí de La Pinilla. Si venimos desde Madrid, la seguiremos hasta Cerezo de Abajo y ahí tomaremos la N-110 hasta el cercano desvío a las pistas, en un recorrido de hora y media y 125 kilómetros. Los que viajen desde el norte, como Burgos, tomarán igualmente la A-1 y se desviarán pasado Castillejo de Mesleón hacia la N-110, tardando más o menos lo mismo, una hora y 25 minutos y 150 kilómetros. Lo mejor de La Pinilla es que las carreteras están muy bien, lejos de las típicas curvas cerradas de montaña que debemos recorrer para llegar a otras estaciones de esquí.
Una vez que lleguemos a las pistas, también tenemos buenas noticias: hay hasta cuatro áreas de estacionamiento para vehículos en la estación de esquí a pocos metros de los remontes, todas ellas gratuitas.
A pesar de ser una estación de esquí de tamaño más bien pequeño, tampoco deja en el aire una buena dosis de diversión de après-ski, con diferentes DJs de house y New Age electrónica en la cota 1500 a partir de las 15 horas; también suele haber fiestas temáticas. Y para continuar el día, siempre podemos seguir con la fiesta podemos seguir tomando algo en alguno de los pubs de Riaza, a cinco minutos de las pistas, donde también deberíais probar su exquisita gastronomía.
No dejéis de hacer algo de turismo por la zona, visitando villas medievales como Maderuelo, Sepúlveda, Pedrada, Ayllón, o un poco más lejos, Burgo de Osma.
