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El Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido es un auténtico paraíso natural al alcance de todos. Podemos explorar sus paisajes con rutas de alta montaña#mce_temp_url#, solo aptas para los más entrenados, pero también con ligeros paseos adecuados para disfrutar en familia. Si en invierno sus laderas quedan completamente cubiertas por un precioso manto blanco, cuando suben las temperaturas, el entorno de Ordesa adquiere un brillante y esplendoroso verde que invita a descubrirlo.
Ordesa está en el corazón de los Pirineos, concretamente del Pirineo Aragonés, y está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Miles de personas se acercan, cada año, a espacios como el Valle de Ordesa, el Cañón de Añisclo, las Gargantas de Escuain o el Valle de Pineta. Casi 90.000 hectáreas de naturaleza salvaje y frondosa y donde, con un poco de suerte, quizás avistéis algún mítico quebrantahuesos.
Una cosa que nos gusta mucho de este destino es que en verano se puede dormir bien, con noches suaves y agradables. Si queréis oxigenaros aquí, no os perdáis sus encantos con estas rutas por Ordesa que te recomendamos.
Esta es la zona más conocida del parque nacional y cuyo acceso más habitual es desde Torla, que tiene un centro de interpretación. Hay que decir que en temporada alta, en verano, el acceso está restringido a los vehículos particulares, de manera que tendrás que coger un autobús que sale desde el pueblo (consulta los horarios de regreso). Aquí algunas ideas de senderismo:
Es una de las más bonitas y populares del entorno, apta para familias acostumbradas a caminar. Son 16,5 kilómetros en total, de un recorrido que es lineal (ida y vuelta por el mismo sitio). Nos ocupará una mañana o una tarde entera, ya que son unas 4 horas y media. La pueden hacer niños a partir de 7 años; no hay dificultad técnica, más allá de la distancia. A los 8 kilómetros nos toparemos con la preciosa “cola de caballo”, una espectacular cascada. En este punto veréis que muchos montañeros se encaraman montaña arriba: son los que se dirigen hacia el Monte Perdido, por las gradas de Soaso. Por el camino os encontraréis con otras cascadas que os irán acompañando en paralelo, con miradores a los que podréis asomaros.
Nos adentramos a una de las rutas más espectaculares del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, de 18 kilómetros y unos 600 metros de desnivel positivo. Haremos un primer tramo con fuerte subida por un zig-zag hasta llegar al mirador de Calcilarruego, con una preciosa panorámica del enclave y vistas al circo de Cotatuero. Se sigue por el circo de Soaso y se llega a la “cola de caballo”, un buen lugar en el que hacer una parada para coger fuerzas.
El valle de Bujaruelo tiene 20 kilómetros y alberga un espacio que ha sido muy reconocido. Es Zona Periférica de Protección del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, Zona Especial de Protección para las Aves (ZEPA), Lugar de Interés Comunitario (LIC) y está integrado en la Reserva de la Biosfera “Ordesa-Vignemale”. En este enclave tan especial os recomendamos estas rutas en Ordesa:
Es una ruta que se aconseja para hacer especialmente en primavera y en verano porque el resto del año suele estar cubierta de nieve. Es recomendada para los que tengan un perfil más montañero, ya que son 12 kilómetros con un desnivel positivo de 1.000 metros. Ahora bien, el esfuerzo bien merece la pena: se llega a un lago de alta montaña con una forma de círculo casi perfecto y con aguas cristalinas y verdonas a 2.330 metros de altura. Tardaremos unas tres horas en llegar desde la salida, que está en el puente romano de Bujaruelo.
Nos vamos a una mítica ruta de Ordesa, que nos lleva desde el refugio de San Nicolás de Bujaruelo hasta la Brecha de Roland, ya en territorio francés. Igualmente, no está recomendada a familias con niños pequeños ni a personas sin costumbre de caminar por montaña, ya que son 18 kilómetros con 1.400 metros de subida. Pasa por el refugio de Sarradets y por varias cascadas, entre las que destaca la cascada de Gavarnie. La brecha de Roland está nevada casi todo el año, pero en verano no suele ser necesario el uso de crampones.
Si te gustan los paisajes estrechos y angostos, no te pierdas la zona de la garganta de Escuain, un desfiladero que está esculpido de forma natural por el río Yaga sobre rocas calizas. Un espectáculo de la naturaleza que te recomendamos explorar con esta ruta de Ordesa:
Una bonita ruta para disfrutar en familia de apenas 4,8 kilómetros y 200 metros de subida. Es un recorrido que sale cerca de la localidad de Revilla y sin pérdida, a través de una senda muy marcada y que parte con unas vistas impresionantes del Castillo Mayor. Pasarás por el barranco de Consusa, que suele estar seco, y sigue por unas escaleras de piedra natural. Aquí tendremos dos opciones: seguir por un pequeño paso aéreo equipado con un pasamanos o bajar al cauce del río y cruzarlo, pasando por una preciosa poza verde en la que seguro que os querréis pegar un chapuzón en los días de más calor. No tiene dificultad, pero si vais con niños hay que andar con precaución.
Seguimos descubriendo impresionantes parajes modelados por ríos, con una de las gargantas de origen fluvial más impactantes del mundo. No estamos exagerando. Para demostrarlo, te diremos que lo compruebes tú mismo con esta mítica ruta de Ordesa que sigue el río Bellós:
Es de las rutas más bonitas del Parque Nacional de Ordesa y también de las más fáciles, por lo que podremos disfrutarla con los peques y con personas que no están acostumbradas a transitar por caminos de montaña. Sale del parking del cañón del Añisclo y atraviesa un puente y sigue por la ermita rupestre de Santa Urbez, ubicada en una cueva incrustada en la roca. Seguiremos por el curso del río Bellós, haciendo una ruta circular que también nos acercará a las ruinas del molino de Asó, a sus cascadas y a una increíble panorámica del cañón. Levantad la mirada en la ruta porque, con un poco de suerte, quizás veáis algún quebrantahuesos en el cielo.
Junto a la Pradera de Ordesa, la también conocida como “La Valle Verde” es el otro gran destino del Parque Nacional de Ordesa (para que te hagas una idea, entre ambos concentran el 70% de las visitas). Destaca por su frondosidad y por el nacimiento del río Cinca. Te recomendamos descubrir este entorno con la siguiente ruta:
Es una de las rutas de Ordesa más espectaculares, pero también de las más exigentes: son 16,4 kilómetros y casi 1.400 metros de subida. Sale del fondo del Valle de Pineta y sube hasta el Balcón de Pineta, con vistas al glaciar del Monte Perdido por su cara norte. Cerca está el lago de alta montaña.
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