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A falta de tan solo dos meses para el inicio de la temporada de invierno en Sudamérica, las estaciones de Argentina y Chile preparan medidas exhaustivas para poder llevar a cabo su actividad, a pesar de no saber con seguridad si podrán iniciar la temporada 2020.
En lo que a la situación del país argentino se refiere, la Cámara Argentina de Centros de Esquí asegura que a pesar de no saber si los centros podrán abrir, ya trabajan en la el diseño e implementación de medidas para poder desarrollar su actividad con las máximas garantías posibles. En la misma línea trabajan las estaciones chilenas, pensando en una posible apertura de sus instalaciones.
Analicemos primero la situación de las estaciones argentinas. Según palabras de Pablo Torres García, Director de la Cámara Argentina de Centros de Esquí y presidente de Cerro Bayo, “se está trabajando con la idea de abrir las estaciones cuando inicie la temporada de invierno. Se está armando un protocolo de funcionamiento que tendrá que estar homologado por el municipio, la provincia y la Nación”. Estas declaraciones hacen referencia a estaciones como Chapelco, la Hoya, Catedral o Las Leñas.
En este protocolo al que se refiere Pablo Torres, se tendrán en cuenta más cuestiones que las propias estaciones de esquí. Dicho protocolo marcará también cómo deberán desarrollar la actividad los comercios de las zonas afectadas. Además, se tomará la temperatura al máximo de esquiadores posibles, protocolos para situaciones de personas con fiebre y cómo deberán formarse las colas para subirse a los remontes para evitar los posibles contagios.
Cabe destacar que ningún centro ha iniciado todavía campañas promocionales referentes a la temporada 2020. La incertidumbre pesa más que cualquier otro aspecto en estos momentos.
Otro aspecto que hay que destacar es el desconocimiento por el momento de cuándo se abrirán las fronteras para permitir el paso de turistas extranjeros. No se espera que se puedan abrir en el corto plazo, por lo que se intuye que, en caso de poder abrir, los centros de esquí recibirán únicamente la visita de turistas locales y nacionales.
No es la primera vez que el sector del esquí vive momentos difíciles derivados de catástrofes o situaciones fuera de control. En 2011, la erupción del volcán chileno Puyehue arruinó la temporada de Villa La Angostura. En ese momento, la región fue declarada “zona de desastre”. Sin embargo, logró resucitar tras el caos.
Sin ir más lejos, el año pasado los problemas volvieron después de un desprendimiento sobre la Ruta 40 en pleno julio, lo que afectó gravemente al turismo de la zona.
Por tanto, desde el país sudamericano apuntan que, dada la experiencia adquirida en situaciones complicadas en el pasado, no se puede permitir que la crisis del coronavirus haga caer a la industria del esquí. Saldrán de esta con total seguridad.
En lo referente a las estaciones del país de Chile, trabajan en la misma línea que sus compañeros argentinos. A la crisis del Covid-19 hay que añadir que, por el momento, la nieve no se ha dejado notar en la zona central del país. Esto supone un problema añadido a la situación actual.
Sin embargo, las estaciones chilenas trabajan para poder abrir cuando las autoridades lo permitan, sea en junio, julio o cuando se pueda. En este sentido, todas trabajan preparando todas las medidas de seguridad necesarias para el óptimo desarrollo de la actividad.
Lo que si es casi seguro es que las fronteras permanecerán cerradas en el medio plazo, lo que provocará que la industria de la nieve chilena pierda uno de sus principales mercados: el turista brasileño.
Desde Esqui.com os mantendremos informados de las novedades que vayan surgiendo en los países de Argentina y Chile.
Fuente: Lugares de Nieve