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Como los remontes mecánicos en Francia permanecen cerrados debido a la Covid-19 y aún no hay una fecha exacta de cuándo podrán abrir, una estación de esquí en los Alpes franceses ha recurrido a caballos y ponis para subir a los esquiadores por las pistas.
A Saint-Léger-les-Mélèzes, en los Hautes-Alpes, se le ocurrió la idea como una forma de permitir a los alumnos de la escuela de esquí continuar sus clases, dentro de las restricciones por la covid-19, en pistas verdes y azules que permanecen abiertas para los estudiantes.
Los caballos utilizados ya están entrenados para subir por las pistas, ya que ya lo hacían antes como parte de sus actividades con un centro ecuestre cercano. La práctica se conoce como “ski-joëring”.
Frédéric Degril, director de l'Ecole de ski français (ESF) en Saint-Léger-les-Mélèzes, explica al canal de noticias local France3 que “dos ponis pueden llevar a cuatro niños y un caballo puede arrastrar a un grupo de ocho niños y la maestra".
“Esto también ha permitido -añade- esquiar un poco a las familias que vinieron a pasar el período festivo en nuestras estaciones de esquí. No vamos a hacer milagros, pero ya estamos haciendo feliz a la gente y eso nos da un poco de moral".
Según uno de los responsables de la cuadra Écins que proporciona los caballos, Anthony Samadet, "cuando uno de los niños cae, el caballo se detiene".
El precio sigue siendo el mismo que en los remontes en años normales: 10 € por trayecto durante dos horas, más el coste de la lección de la escuela de esquí.
La práctica de usar ponis y caballos para subir a los esquiadores a las pistas podría convertirse en un elemento permanente en la ciudad incluso después de que los remontes se vuelvan a abrir, ya que los niños y los visitantes han aplaudido este nuevo tipo de ascensos de tracción animal.
Fuente: lugaresdenieve.com