Debes introducir un correo electrónico que sea correcto y aceptar la política de privacidad
Ha ocurrido un error. Vuelve a intentarlo y si el problema continua puedes escribirnos en info@esqui.com
Te has suscrito correctamente
Estado de pistas y meteorología
Ofertas
Hoteles por zonas
Estado de pistas por zonas
Ofertas de esquí por zonas
Ofertas por fecha
Hoteles por estaciones
Hoteles por estaciones
Hoteles por estaciones
Estado de pistas por estaciones
Estado de pistas por estaciones
Estado de pistas por estaciones
Estado de pistas por estaciones
Estado de pistas por estaciones
Estado de pistas por estaciones
Ofertas por estaciones
Ofertas por estaciones
Ofertas por estaciones
Ofertas por estaciones
No dejan de sorprendernos las posibilidades de reutilizar antiguos remontes mecánicos “jubilados” por las estaciones de esquí para darles nuevas utilidades.
El último ejemplo nos llega desde Suiza, donde una pareja de emprendedores ha convertido una cabina de la telecabina Engelberg-Ristis, en una suite de lujo para pasar la noche colgando a 1.800 metros de altitud.
Situada al borde del precipicio, la cabina, rebautizada como Tiny House Gondel, se ha convertido en el nuevo atractivo turístico de este verano de Brunni-Bahnen Engelberg AG.
La campaña publicitaria anuncia que al dormir allí se siente como si la telecabina estuviera flotando en ¡una experiencia de la noche a la mañana que nunca olvidarás!
"La cabina tiene alrededor de 30 años, pero es muy moderna", dice Roman Barmettler, director gerente de Brunni-Bahnen. Por ejemplo, cuenta con una cocina pequeña y moderna, dos calentadores para que los clientes no se congelen durante la noche, hay un baño biológico al lado y si es necesario también se pueden utilizar las duchas en el albergue de montaña Ristis.
La cena se puede pedir por adelantado y te la llevan a la cabina, lo mismo que el desayuno a la mañana siguiente, y el acceso se hace mediante la huella dactilar.
La transformación de la cabina es obra de Valeria y Adrian Rüedi. La pareja tuvo que trabajar con mucho cuidado para que todo encajara. “Nuestro objetivo es llevar la pequeña telecabina a los lugares más espectaculares de Suiza. ¡Creemos que definitivamente lo hemos logrado aquí!”, dicen los dos.
De hecho, la cabina permanecerá en la aguja de Brunni hasta el 31 de octubre. Después de eso, el pequeño hotel de una cama se trasladará a una nueva ubicación, aún por determinar, pero tanto o más espectacular que la actual.
La pernoctación está a la altura de la experiencia y cuesta entre 490 y 510 francos suizos, alrededor de 450 euros para dos personas.
Fuente: lugaresdenieve.com