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Comprar en el supermercado es más caro. Echar gasolina también. El café de las mañanas o el menú de mediodía. Gran parte de la culpa está en el fuerte incremento de la electricidad. La inflación de los países europeos rondan la media del 10%. Muchos la superan ampliamente. Así que en este contexto en que todo el mundo ha tirado por la vía de subir precios, las estaciones de esquí no podían quedarse atrás.
Las de Aragón también. Aramón ya lanzó hace semanas su forfait de temporada con tan solo un incremento del 4%. Todo un espejismo en un contexto económico en que en España la inflación ya está por encima del 10%. Las otras dos estaciones restantes, Astún y Candanchú todavía no han puesto a la venta sus pases, pero advierten que probablemente tendrán que hacer también una subida de precios.
Stephan Pantoja, director comercial de Candanchú, explica al Heraldo de Aragón que: "El gasto energético es muy significativo en nuestra cuenta de explotación. No solo por ser dependientes 100% de la electricidad para el funcionamiento de los remontes, también por el coste del gasóleo para las máquinas pisapistas y otros vehículos de la estación."
Una opinión en la que coincide también el Director Comnercial de Astún, Andrés Pita: "No sabemos lo que va a pasar. Los gastos han subido cerca del 100%. Estamos preocupados y expectantes por lo que pueda ocurrir de aquí al inicio de la temporada. Porque no solo se ha encarecido la energía eléctrica sino también los transportes, los recambios, las materia primas...".
Con más de dos meses por delante para el inicio de la temporada de esquí 2022-2023, ambas estaciones analizan fórmulas que se puedan aplicar para hacer frente a la factura de la electricidad que se les presenta y sin que afecte al servicio al cliente.
En los Alpes hay complejos invernales que han anunciado la reducción de velocidad de remontes o incluso directamente el cierre durante parte del invierno. Hay quién podría no ofrecer esquí nocturno, no pisar ciertas pistas o no poner en marcha ciertas comodidades como la calefacción en remontes.
De momento las estaciones de esquí de Aragón no han indicado por donde podrían recortar, aunque al Heraldo de Aragón ya han indicado de que momento se descarta tomar algún tipo de acción similar. No obstante desde Candanchú se ha advertido que podría tener que retocarse el precio del forfait si el precio de la electricidad sube de manera insostenible: "Hemos considerado reducir horarios o pisar menos pistas, pero no se puede. Hay unos costes mínimos que no puedes omitir. Lo mismo con la nieve artificial. Si no la haces cuando se dan las condiciones, luego lo pagas.
"El problema es que una vez que comienza la temporada ya no hay margen de maniobra para modificar los precios, por lo que ahora hay que planificar bien pese a la incertidumbre de cómo se comportará el mercado a final de año. En todo caso se subirán los precios lo justo para seguir siendo competitivos".
Desde la estación de esquí de Astún también están de acuerdo en que no se puede recortar el servicio al cliente.
"Preparamos un plan de ahorro energético, como no puede ser de otra forma, pero no podemos recortar la luz de los remontes o la producción de nieve artificial, hay poco margen. Analizamos todas las medidas posibles, pero hay un límite, que es el servicio a los clientes.
Habrá incremento de tarifas, pero no se podrá cubrir el incremento de la electricidad porque no podemos trasladar todo el sobrecoste al forfait porque sería inviable"
Toca ahora un periodo para estudiar bien y planificar bien que se va a hacer, porque como recuerda el director comercial de Candanchú en el Heraldo, una vez que comienza la temporada, ya no hay margen de maniobra para modificar los precios.
Fuente: nevasport.com
