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Una de las mejores estaciones de esquí de los Pirineos, como es Grandvalira en Andorra, no descuida un aspecto importante en nuestro viaje a la nieve: la gastronomía. Y es que comer bien no puede faltar en un día de intenso esfuerzo físico. Aquí hay muchos restaurantes de calidad y de todo tipo en pistas, desde aquellos con servicio a la carta para comer sentado y sin prisas en medio de una jornada de esquí, hasta self-service para mayor rapidez y volver cuanto antes a las pistas, tipo "fast food" (pero gourmet, con productos de calidad) y cenas de montaña, para cerrar un día perfecto con una velada mágica en medio de un paisaje nevado en plena naturaleza.
Estos establecimientos gastronómicos están repartidos por los diferentes sectores del dominio de Grandvalira: Encamp, Canillo, El Tarter, Soleu, Peretol, Grau Roig y Pas de la Casa. ¿Cuáles son los mejores restaurantes de Grandvalira? Aunque todos ofrecen una cocina tradicional y de calidad, una auténtica gastronomía de altura, estas son nuestras recomendaciones.
Es el restaurante que alberga la esencia de Ibiza en medio de las pistas de Grandvalira, ya que bebe de uno de los "beach" clubs más representativos de las Islas Baleares. En el antiguo Costa Rodona de Pas de la Casa, ha abierto un Snow Lounge con cocina mediterránea adaptada al clima pirenaico Una delicia de lo más saludable, para los paladares más selectos. Entre sus platos más destacados están la carne de matanza, el arroz de marisco, los entrecots, las chuletas de carne y las hamburguesas de ternera de Andorra. Si sois fans de los postres, es obligatorio probar su típica "Greixonera".
Tiene tanto servicio interior como exterior, con una espléndida terraza muy agradable en los días cálidos. Está amenizada con música del DJ residente y tiene mesas, hamacas y sofás, en la que podremos tomar algo y darnos un respiro en medio de la jornada de esquí. También ofrece cenas de montaña, con reserva previa.
La comida sabe mejor en un entorno espectacular y así lo podremos comprobar en este refugio-restaurante de cocina tradicional en una ubicación privilegiada: a 2.350 metros, a los pies del Lago de Pessons y en el circo de Colells, de origen glaciar. Ofrece una exquisita gastronomía de montaña, con platos entre los que destacamos la escudella, el trinxat típico de la zona, sus huevos estrellados, los arroces, las carnes a la brasa con ternera de wagyu o las ostras Amélie. El postre no se queda atrás, con joyas gastronómicas sorprendentes vinculadas al mundo de la nieve y la montaña. Uno de los mejores restaurantes de Grandvalira y, nos atreveríamos a decir que de Andorra.
Tiene una fantástica terraza que podremos disfrutar en días soleados tomando un buen champagne o cava y con vistas al lago y a las preciosas montañas nevadas de los Pirineos. También dan la opción de reservar una cena con productos de alta gama, que podemos complementar con una actividad nocturna, como ruta en motos de nieve o raquetas. No podemos dejar de mencionar que la construcción es de lo más encantadora, ya que es una típica borda andorrana.
¿Qué podemos decir del mítico L'Abarset? Es uno de los destinos más populares de la fiesta y del après-ski en los Pirineos. Pero es que ahora es, también, un magnífico restaurante en el que desayunar, comer o cenar en Grandvalira (¡está todo el día abierto!). Un proyecto totalmente renovado, une ocio, música y gastronomía de altura en una sala de lo más acogedora, con mobiliario y decoración rústica, con formas orgánicas. Tiene más de 2.000 metros cuadrados de superficie, dos plantas y una increíble terraza de 700 metros cuadrados.
En este decorado de lujo podremos degustar platos excepcionales, de estilo alpino, familiar y tradicional. Por la mañana, se sirven contundentes desayunos de montaña, con tenedor; al medio día, el local se transforma en vermutería, con vinos y tapas de altura; por la tarde, vuelve el emblemático après-ski con sesiones de Djs, momento en el que podremos picar algo; por la noche, sirve cocina local a la carta, con caldereta de ciervo, fondues de queso y postres caseros. Este restaurante (y mucho más) es una parada obligatoria para esquiadores en Andorra.
Los amantes de los arroces no podéis dejar de comer en este restaurante para esquiadores de Grandvalira. Ofrece arroces que no probaréis en ningún otro sitio, ya que son de receta propia, todos con productos de alta calidad. Toma nota de algunos de los mejores: arroz con setas y foie y arroz caldoso de bogavante con picada de mortero. También tienen otras opciones, como pescado fresco y carnes al horno de carbón Josper. Como entrantes, hay fantásticos platos para ir abriendo boca; no os perdáis el jamón Joselito o las ostras de Oléron Fine de Claire. Hay menús degustación con copa de champagne Clicquot.
Esta arrocería que debe su nombre a un pino que está muy cerca, en el Pla de Ribaescorjada, y que era simbólico para los pastores porque lo utilizaban como reloj solar, ofrece una preciosa terraza con una de las mejores vistas de El Tarter en Grandvalira, a 2.100 metros de altitud. Tambiñen se pueden pedir cenas de montaña en este entorno idílico, con reserva previa. Es un restaurante mítico para esquiadores en Andorra, ya que hasta aquí solo se puede llegar esquiando o con forfait.
Un restaurante de lo más familiar a pie de pistas en Grandvalira, con una encantadora decoración rústica con mucha presencia de piedra y madera, que le da un toque de lo más acogedor a la comida. Está al lado del telecabina de Canillo, por lo que únicamente podremos acceder a él esquiando o con forfait. Está especializado en platos de cocina tradicional de los Pirineos, entre los que no faltan los trinxats, carnes cocinadas a baja temperatura o al grill, ni los postres caseros. Tiene una buena relación calidad-precio.
Además, cuenta con una amplia terraza que es de lo más agradable en días soleados de invierno. También se sirven cenas de montaña en un entorno de lo más especial, pero únicamente con reserva previa.
Una opción de restaurante con carta con una personalidad muy mediterránea, ya que ofrece cocina italiana. Ubicada en el sector de Grau Roig, permite escoger entre una gran variedad de platos de arroces, pizzas, pastas, ensaladas, carnes y pescados, todos contundentes para afrontar una intensa jornada de esquí. En su carta destacamos: el carpaccio de ternera con virutas de parmesano; los canelones de asado gratinados; el risotto de montaña, con pollo, morcilla y verduras; la pizza andorrana con alcachofa, butifarra confitada y salsa de romero; y, de postre, la pizza de ricota, miel, nueces y membrillo.
Tiene una decoración rústica, con un interior muy espacioso y luminoso. Tampoco falta una amplia terraza en la que disfrutar de los días soleados, con vistas a las pistas. Este restaurante para esquiadores de Grandvalira también sirve cenas de montaña, pero solo con reserva previa y para grupos. Por la noche, se ofrecen dos tipos de menú especiales: menú entrecotte y menú fondue.