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Un paso más para poder ver hecho realidad la conexión entre las estaciones de Astún y Candanchú mediante un telecabina en forma de L. Un proceso que como se puede ver, está lleno de trámites. Uno de ellos es el Proyecto de Interés General de Aragón (PIGA). Sin esta documentación no se podía adjudicar las obras y por tanto perder los Fondos de la Unión Europea.
Y es que, uno de los requisitos para poder usar esos 10 millones de euros provenientes de los Fondos Next Generation21, era que la adjudicación de las obras estuviesen listas antes de final de año. Y si todo va bien, y tras el examen del departamento del Gobierno de Aragón, se podrá hacer entre finales de agosto y mediados de septiembre, tal como publica hoy el Heraldo de Aragón.
El PIGA es el Proyecto del conjunto de las obras. Analiza tanto los impactos en la fauna y flora, como los riesgos de seguridad que pueda conllevar la instalación de infraestructuras en ciertos tramos. Los responsables de su evaluación suelen pedir alguna modificación que se puede resolver rápido, ya que el estudio de Ingeniería trata de adelantarse a estos posibles problemas, y los resuelve antes de entregar la redacción del Proyecto.
Esta ha sido quizás una de las causas por la que el proyecto para conectar las estaciones de esquí de Astún y Candanchú mediante un telecabina, ha acumulado tanto retraso. De hecho, se especulaba con que se agotaban los plazos y el remonte tenía riesgo de no verse hecho realidad.
Un retraso que no solo se ha dado en este telecabina, sino en otros proyectos distintos de otras comunidades ligados a los Fondos Next Generation. Tanto es así, que el Ministerio de Industria y Turismo decidió dar algo más de margen. Si en un principio se pedía que el 50% de la obra estuviese hecha antes de que acabase 2024 para acabarla como muy tarde en el primer trimetres de 2026 (que es cuando se presenta la justificación a la Unión Europea), ahora solo hará falta que las obras estén adjudicadas este año para dar por cumplido el primer hito.
La DGA asegura que van a poner de su parte para cumplir esa parte, y acelerar el tiempo que suele tardar en aprobar el PIGA (a veces más de un año como pasó con la plataforma logística PLA-ZA).
¿Qué queda a partir de ahora? Pues la aprobación de ese PIGA en un tiempo récord, luego la exposición pública por si alguien quiere hacer alegaciones y consultar a todos los organismos públicos implicados (Ayuntamientos, Diputación, Autonomía y Estado).
Fuente: nevasport.com
